Demandan a Chat GPT por robarse la información de Internet

ChatGPT de OpenAI está problemas legales y judiciales. OpenAI está siendo demandado por usar ilegalmente contenido de Internet para entrenar su modelos de lenguaje e inteligencia artificial.

Se presentó una demanda colectiva en los EE. UU.  contra OpenAI, el creador de ChatGPT, alegando que los métodos de entrenamiento de IA de la compañía violaron la privacidad y los derechos de autor de prácticamente todos los que alguna vez compartieron contenido en línea.

OpenAI recopiló una enorme cantidad de datos de varias fuentes en Internet para entrenar sus modelos avanzados de lenguaje de IA. Estos conjuntos de datos consisten en una amplia gama de materiales, como artículos de Wikipedia, libros, publicaciones en redes sociales e incluso contenido explícito de géneros especializados.

Fundamentos de la demanda

Más importante aún, alegan en la demanda colectiva, la empresa OpenAI adquirió todos estos datos sin solicitar el permiso de los creadores de contenido.

Esta demanda colectiva, que se presentó en el Estado de California, argumenta el incumplimiento de los protocolos adecuados por parte de OpenAI, incluida la obtención del consentimiento de los creadores de contenido,. Ello equivale a un robo de datos, violación de derechos de autor y normativa concordante.

La demanda dice: “En lugar de seguir los procedimientos establecidos para la adquisición y el uso de información personal, los Demandados recurrieron al robo. Recolectaron sistemáticamente 300 mil millones de palabras de Internet, incluidos “libros, artículos, sitios web y publicaciones”, que también incluían información personal obtenida sin consentimiento”.

Otra de las leyes citadas es la Ley de Abuso y Fraude Informático, un estatuto federal contra la piratería informática que se ha invocado en disputas de scraping anteriormente. La demanda también incluye reclamos de invasión de la privacidad, hurto, enriquecimiento injusto y violaciones de la Ley de Privacidad de las Comunicaciones Electrónicas.

Al apropiarse indebidamente de datos personales a gran escala para ganar una “carrera armamentista de IA”, OpenAI accede ilegalmente a información privada de las interacciones de las personas con sus productos y de las aplicaciones que han integrado ChatGPT, afirman los demandantes. Dichas integraciones permiten a la empresa recopilar datos de imagen y ubicación de Snapchat, preferencias musicales en Spotify, información financiera de Stripe y conversaciones privadas en Slack y Microsoft Teams, según la demanda.

Es un argumento válido que si ha estado activo en Internet en las últimas décadas, es probable que sus contribuciones digitales se incorporen a los conjuntos de datos de OpenAI. En consecuencia, cualquier salida generada por los modelos de lenguaje de OpenAI, que se utiliza con fines de lucro, puede contener fragmentos de sus datos obtenidos a través del scraping silencioso.

Ryan Clarkson, el socio gerente del bufete de abogados que demandó a OpenAI, explicó a The Washington Post que “toda esa información se está tomando a escala” sin que originalmente estuviera destinada a ser utilizada por un modelo de lenguaje extendido.

El resultado del caso en los tribunales sigue siendo incierto. La infraestructura de Internet es compleja y la noción de una web libre y abierta a menudo no es del todo precisa. Las plataformas en línea tienen sus propios términos y acuerdos con los usuarios, e incluso si los usuarios aportan contenido a estas plataformas, la propiedad generalmente pertenece a la plataforma en sí y no a los usuarios.

Katherine Gardner, abogada de propiedad intelectual, señaló que cuando los usuarios cargan contenido en las redes sociales o en cualquier otro sitio, generalmente otorgan a la plataforma una licencia amplia para usar su contenido de varias maneras. Como resultado, sería un desafío para los usuarios comunes reclamar el derecho al pago o compensación por el uso de sus datos en modelos de entrenamiento.

Texto completo de la demanda