El pueblo noruego donde por ley está prohibido morirse y es obligatorio portar armas
Nadie se puede morir en Svalbard o, al menos, no puede ser enterrado ahí desde hace casi 70 años
Por Alan Wilder
En esta sección de leyes del mundo today, viajamos al archipiélago noruego de Svalbard, un grupo de islas en el océano Glacial Ártico, se encuentra a unos 1.500 kilómetros del Polo Norte y esconde numerosas peculiaridades tras sus escarpadas y blancas montañas.
En Spitsbergen, la mayor de las tres, se encuentra Longyearbyen, su capital de facto, y sus poco más de dos mil habitantes viven en el pueblo más septentrional del planeta. Durante más de cuatro meses no ven la luz del sol y la vida se desarrolla tranquila.
Lo más llamativo de este lugar es que en ahí está prohibido morir. Una ley que rige en Longyearbyen desde 1950 obliga a emigrar antes de pasar a la otra vida, ya que los cuerpos no se descomponen en un hábitat en el que el frío puede alcanzar los 46 grados bajo cero y la máxima de las últimas dos décadas no alcanza los 18 grados en junio.
Los cementerios están prácticamente vacíos desde hace 70 años. En el caso de que a un habitante se le diagnostique una enfermedad terminal o se tema por su vida, debe ser trasladado.
Incluso la ley aclara que los habitantes que desean descansar en estas tierras, deben conformarse con dejar por escrito que sus cenizas sean esparcidas en el lugar y se recomienda que las embarazadas se trasladen al sur, a la península, a lugares más cálidos de Noruega, para dar a luz.
En estas islas, descubiertas por el holandés Willem Barents en 1596, también rigen otras leyes curiosas: dado que en Longyearbyen hay más osos polares que personas- el número de habitantes asciende a 2.200, mientras que el de osos llega a más de 3.000.
Por eso, tal como advierten las señales viales, en caso de moverse por fuera del territorio de la ciudad se solicita portar un rifle (aunque esto no habilita la caza, está estipulado que es para defensa personal).
Para mayor información sobre Svalbard te recomendamos este video del canal de YouTube “Un Mundo Inmenso”: