Guía para comprar o hacer leche de almendras

El sitio australiano Choice escribió una reseña de las leches de almendras del mercado. La periodista Rachel Clemons
hizo un sumario sobre el uso de leche de almendras es una de las alternativas lácteas más populares y ampliamente disponibles.

¿Cómo se compara el contenido de almendras de la leche de almendras casera y comprada en un local? ¿Y cómo lo haces tú mismo en casa? Leche de almendras, guía comparativa y recetas

Guía de la leche de almendras

Es soja, lactosa y sin lácteos, por lo que es apto para personas alérgicas o intolerantes a la soja y la leche de vaca o intolerantes a la lactosa, así como para quienes siguen una dieta vegana.

Las almendras contienen grasas monoinsaturadas saludables para el corazón y son bajas en grasas saturadas. La leche de almendras es naturalmente baja en kilojulios. La leche de almendras sin azúcar comprada en la tienda contiene solo 93 kJ (22 calorías) por cada 100 ml en promedio.

La leche de almendras tiene menos proteínas que la leche de vaca, aunque algunos productos lácteos de almendras contienen ingredientes como la proteína de soja o de guisantes, que aumenta su contenido de proteínas.

Casi la mitad de los productos de leche de almendras que analizamos están endulzados; busque jarabes de azúcar, maltodextrina, agave o arroz en la lista de ingredientes.

No siempre está fortificado con calcio, por lo que si lo usa como una alternativa a los lácteos, busque productos con al menos 120 mg de calcio por 100 ml (la misma cantidad que se encuentra en la leche de vaca baja en grasa).

Porcentaje de almendras: leche de almendras casera versus comprada o envasada

Cuando se trata de leche de almendras, es posible que no siempre obtenga lo que espera. Algunos productos contienen tan solo un 2% de almendras, una fracción de lo que incluiría si siguiera una receta en casa con un procesador de alimentos o una máquina especial.

El contenido de almendras es relevante. Si está bebiendo leche de almendras por los nutrientes saludables para el corazón que ofrecen las almendras, obviamente, cuanto mayor sea el contenido de almendras, mejor. Pero incluso si solo le preocupa el sabor, quiere saber que está obteniendo una buena relación calidad-precio.

Entonces, ¿cómo se comparan las leches de almendras caseras y las comerciales? Para ver lo que obtiene de una leche de almendras casera, preparamos un lote en la cocina de prueba de CHOICE siguiendo una receta estándar de una parte de almendras por tres partes de agua (sin los extras opcionales): un contenido de almendras del 25%, en otras palabras.

Usamos una Thermomix para procesarlo, aunque podría usar cualquier procesador de alimentos (use el accesorio de disco de máxima capacidad de líquido para evitar explosiones de salpicaduras), una súper licuadora o una máquina de cocina todo en uno, luego enviamos el producto final al laboratorio para su análisis. .

Las almendras (con piel) tienen un 19,7% de proteína, según la base de datos de composición de alimentos del gobierno. Por lo tanto, la leche de almendras elaborada con un 25% de almendras debe contener cerca de 4,9 g de proteína por 100 ml, suponiendo que haya logrado extraer cada de proteína de la pulpa antes de desecharla.

Los resultados de las pruebas de laboratorio mostraron que nuestra muestra casera contenía una impresionante proteína de 4,8 g por 100 ml.

 

Leche de almendras comprada en los locales

En nuestra comparación de la leche de almendras, observamos el contenido de almendras en la etiqueta de más de 40 productos comerciales de leche de almendras y encontramos un rango considerable: desde poco más del 2% hasta unos pocos que contienen alrededor del 10%.

Si elige su leche de almendras según el contenido de almendras indicado, le sugerimos que también verifique el valor de la proteína en el panel de información nutricional del producto para ver si los números cuadran.

Si las almendras tienen un 19,5% de proteína, se deduce que un producto elaborado con un 10% de almendras debe contener cerca de 2 g de proteína por 100 ml, por ejemplo.

A veces, los productos contienen menos (o más) proteínas de las que cabría esperar, y existen algunas razones por las que este podría ser el caso.

Ocasionalmente, el contenido de almendras indicado es para almendras “activadas”, es decir, almendras que se han remojado en agua durante 12 horas, supuestamente para mejorar la digestibilidad y nutrición de la nuez.

Pero a menos que las almendras activadas se deshidraten posteriormente antes de usarlas para crear la leche de almendras, el peso inicial de las almendras (y, por lo tanto, el porcentaje de contenido de almendras indicado en la etiqueta) se infla con el agua absorbida durante el proceso de activación.

Las variaciones del contenido de proteína esperado también pueden ocurrir debido a la forma en que se procesan las almendras, o si se han agregado otras fuentes de proteínas, como la avena, la soja o la proteína de guisantes, por ejemplo.

Algunas leches de almendras compradas en la tienda también están fortificadas con calcio, lo cual es útil si lo compra como sustituto de la leche de vaca.

Receta: Cómo hacer leche de almendras casera

Una búsqueda rápida en línea arroja muchas recetas diferentes de leche de almendras. Este es el que seguimos para preparar nuestra muestra.

Ingredientes para leche de almendras

220g de almendras enteras crudas
660 g de agua, refrigerada

Método para preparar leche de almendras

Remoje 220 g de almendras crudas en agua durante la noche.
Escurre las almendras, colócalas con 660 g de agua fría en el mezclador elegido y licúa durante unos dos minutos.
Vierta en una bolsa de nueces o un paño de muselina sobre una jarra o tazón y apriete con la mano para extraer el líquido.
Enfríe antes de servir.
Hace aprox. 700 ml de leche de almendras