Por Clara Cattarossi
Esta sección de notas destaca a aquellas empresas que contribuyen en mejorar el mundo desinteresadamente, y por eso en Derecho en Zapatillas pensamos automáticamente en Gino Tubaro, inventor argentino y estudiante de Ingeniería Electrónica con especialización en impresión 3D. En 2015, Gino fundó la ONG Atomic Lab, con el fin de crear prótesis económicamente accesibles hechas con impresoras 3D para aquellos con recursos limitados. Ha sido reconocido con personas de la talla de Barack Obama y premiado por History Channel. Charlamos con Gino en Twitter Spaces desde @dzapatillas.
¿De qué trata Atomic Lab?
Es un proyecto que ayuda a un montón de gente a tener una prótesis, algo fundamental para tener una vida normal. Entregamos manos mecánicas para chicos y chicas que nacieron sin brazo, y donde la mayor complicación para conseguirlas hoy en día es en día en Argentina. Una prótesis normal, que es básicamente el brazo de un maniquí, sale entre 5.000 y 10.000 dólares. La situación en nuestro país es que, además de ser inviable para la mayoría, la obra social no cubre esos gastos. La solución que encontramos fue, mediante la impresión 3D, hacer estas prótesis para niños, adolescentes y adultos en 24 o 48 horas, a diferencia de las comunes que toman seis meses. También podemos reducir los costos a 10 o 12 dólares, y pueden ser donadas a cada una de las personas que las soliciten. Así es como transformamos a chicos en superhéroes.
Además de proveerles las prótesis, ¿cómo logran convertirlos en superhéroes?
Esto va de la mano con que a los chicos con discapacidades físicas los ponen siempre últimos en la fila, los eligen últimos, no les dan bola en los deportes, etc. Cuando a un chico le hacemos una prótesis con imágenes de Iron Man o de Superman, lo muestran en la escuela y empieza otro tipo de interacción. Rompimos esa barrera física que puede ir desde saltar una cuerda o andar en bici hasta lucir una prótesis colorida y divertida. El colmo es cuando les agregamos una herramienta como un lanza tajo, y esas cositas son las que hacen que la discapacidad pasen a un segundo plano. Todos los planos están gratuitamente en internet para quien quiera imprimirlos.
¿En dónde más notás la discriminación a la gente con discapacidad?
Algo que pasa muy seguido es que no se puede cruzar fronteras con prótesis porque la ANMAT no lo permite, por tanto es ilegal.
En cuanto a los adultos, por ejemplo, conseguir laburo es muy difícil. Que te falte una mano no significa que seas inútil para todo, más bien lo contrario: conocemos el caso de alguien que perdió el brazo en una fábrica, haciendo algo súper mecánico y automatizado, y pasó a hacer un trabajo más preciso como relojería, por muy increíble que parezca.
Teniendo en cuenta la situación complicada del país, ¿cómo lograron tener la llegada que tienen hoy?
Empezamos de a poco pidiendo monedas. Siempre fue muy importante para mí y para todos los que trabajamos en Atomic Lab seguir trabajando y creyendo en lo que hacíamos. Lentamente nos dimos a conocer en el exterior, y la clave fue el reconocimiento de Obama; en países como Brasil, hasta que no mostrábamos el video, parecía que los íbamos a molestar nomás. Entiendo también que es una responsabilidad muy grande anotar a tu hijo en una plataforma para que le den una prótesis.
Como ya hemos visto con Paratrek, las personas con discapacidad no solo sufren a nivel físico sino también emocional y socialmente. Por suerte, personas como las de Atomic Lab se encargan de solucionar tanto la discapacidad como el bienestar personal, haciéndoles sentir no solo que son normales sino que más, también.
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