Mindfulness: una problemática ante comportamientos sociales

Por Eric W. Dolan

---

Una serie de estudios ha descubierto una relación causal entre el Mindfulness y la disminución de los sentimientos de culpa. Los hallazgos han sido publicados en el Journal of Personality and Social Psychology.

Varios estudios han encontrado que el Mindfulness (meditación de atención plena) atrae el enfoque de las personas hacia adentro y reduce las emociones negativas. Pero algunas emociones negativas proporcionan una retroalimentación social útil. Por ejemplo, los sentimientos de culpa ayudan a empujar a las personas a expiar sus transgresiones contra los demás. El nuevo estudio proporciona evidencia de que la atención plena puede conducir a resultados indeseables al amortiguar los sentimientos de culpa.

 

Testimonios de esta problemática

“Estaba interesado en hacer esta investigación porque, después de que comencé a estudiar meditación y a meditar yo mismo, noté que la estaba usando casi como una forma predeterminada de reaccionar ante los factores estresantes”, dijo el autor del estudio, Andrew C. Hafenbrack, profesor asistente de la Universidad de Washington. “Esto fue genial cuando estaba rumiando demasiado o reaccionando de forma exagerada a algún problema menor, y es una poderosa ayuda para dormir. A veces, sin embargo, esto significaba que meditaba o me concentraba en mi respiración en situaciones en las que realmente había un problema importante y en las cuáles hubiese sido mejor si lo hubiese enfrentado directa e inmediatamente”.

“Tenía cierta confianza en que no estaba solo en esto cuando leí un artículo de Harvard Business Review escrito por el médico y coach ejecutivo David Brendel en 2015, donde describió que ‘trabajó con clientes que, en lugar de pensar racionalmente en un desafío profesional o dilema ético, prefieren desconectarse de sus desafíos y retirarse a una mentalidad meditativa. El problema aquí es que algunos problemas requieren más pensamiento, no menos’”.

“También conozco a varias personas a las que les gustan las prácticas de mente y cuerpo, incluida, entre otras, la meditación de atención plena, pero que son inusualmente escamosas o no tratan a otras personas particularmente bien. Así que me pregunté qué estaba pasando. Parecía ir en contra de la esencia de lo que pensaba que se suponía que hacían el Mindfulness y la meditación, lo que se debe en gran parte a las asociaciones que tenía basadas en las formas tradicionales o religiosas”.

 

¿Es realmente un problema?

Los investigadores realizaron ocho experimentos separados, que incluyeron a más de 1400 participantes. En los estudios, algunos participantes fueron asignados al azar para escuchar una grabación de meditación guiada de 8 minutos creada por un instructor profesional de Mindfulness. Mientras que otros fueron asignados a una grabación de 8 minutos del mismo orador en la que se les indicó que pensaran en lo que les viniera a la mente.

Los participantes que escucharon la grabación de la meditación guiada tendieron a tener sentimientos reducidos de culpa. A su vez, estaban menos dispuestos a participar en conductas reparadoras prosociales en respuesta a las transgresiones.

Por ejemplo, en dos experimentos, a los participantes se les pidió que recordaran y escribieran sobre un momento en que habían hecho daño a alguien y se sintieron culpables, antes de ser asignados al azar a meditar o no. Después de eso, se les pidió que asignaran U$D 100 hipotéticos entre un regalo de cumpleaños para la persona a la que habían agraviado, una organización benéfica para las víctimas de las inundaciones africanas y ellos mismos. Los participantes que habían meditado asignaron aproximadamente un 17 % menos a la persona a la que habían agraviado en comparación con los que no habían meditado.

Los participantes que escucharon la grabación de la meditación guiada también tendieron a escribir disculpas menos sinceras a aquellos a quienes habían lastimado. Es importante destacar que los investigadores encontraron que el efecto negativo del Mindfulness en la reparación prosocial se explicaba por completo por la reducción de los sentimientos de culpa.

“La meditación consciente de respiración enfocada reduce de manera confiable las emociones negativas, lo que hace que las personas se sientan mejor. Sin embargo, todas las emociones son en parte una forma de información y, en muchos casos, ignoramos esa información bajo nuestro propio riesgo”, dijo Hafenbrack a PsyPost.

En su experimento final, los investigadores compararon el Mindfulness con otra forma de práctica meditativa conocida como Loving Kindness Meditation (meditación de bondad amorosa). Esta práctica consiste en ejercicios de imágenes en los que uno evoca a otras personas y envía deseos de que todos estén felices, bien y libres de sufrimiento. Hafenbrack y sus colegas descubrieron que la meditación de bondad amorosa condujo a una mayor disposición a participar en un comportamiento reparador y redujo el enfoque en sí mismo en comparación con la meditación de atención plena.

 

¿Cuál es la alternativa y solución del Mindfulness?

“Una forma de meditar con menos riesgo de que te haga tratar peor a los demás es participar en la meditación de bondad amorosa, que descubrimos que conduce a niveles más altos de comportamiento reparador prosocial que la meditación de respiración enfocada”, dijo Hafenbrack. “Mientras que la meditación de atención plena y respiración enfocada hace que las personas se concentren en sí mismas (sus propias sensaciones físicas, pensamientos y emociones) y al hacerlo hace que las personas se calmen (al eliminar las emociones negativas), la meditación de bondad amorosa aumenta el enfoque en otras personas y aumenta las emociones positivas como el amor.”

Los nuevos hallazgos proporcionan evidencia de una rara consecuencia negativa de la meditación de atención plena. Pero los investigadores no creen que la meditación consciente sea inherentemente mala.

“Creemos que esta investigación es una advertencia en sí misma”, dijo Hafenbrack a PsyPost. “Lo que quiero decir con eso es que el Mindfulness en la respiración enfocada generalmente conduce a un comportamiento más de ayuda, lo que James Donald y sus colegas demostraron que era un efecto confiable en un metanálisis publicado en 2019 de 31 estudios con más de 17,000 participantes. Estamos indicando una excepción o advertencia a ese hallazgo: cuando la razón por la que las personas serían útiles es porque hicieron daño a otra persona y se sienten culpables, la meditación de atención plena en realidad reduce ese tipo de comportamiento de ayuda”.

 

¿Qué se sabía anteriormente?

Investigaciones anteriores también han encontrado que la meditación consciente puede aumentar el egoísmo entre algunas personas. Pero la secularización de la meditación podría ser parcialmente culpable.

“Desde una perspectiva darwiniana, las personas tienen tantas emociones negativas en parte porque esas emociones fueron adaptaciones funcionales que ayudaron a nuestros antepasados ​​a sobrevivir a los elementos y procrear. Por lo que al menos deberíamos preguntarnos qué emociones negativas intentan decirnos antes de reducirlas a través de la meditación. , consumo de alcohol u otros medios”, dijo Hafenbrack.

“Antes de que el Mindfulness fuera popular en los países occidentales, la mayoría de las personas no buscaba una nueva religión (ya sea porque ya tenían una o porque eran escépticos de las religiones). También, habría habido rechazo a tratar de difundir prácticas que se sintieran religiosas en el gobierno o las empresas.

Como Jaime Kucinskas describió en varios artículos y en el libro The Mindful Elite, los defensores occidentales de la atención plena la secularizaron, eliminando cosas que se sentían religiosas como la adoración al gurú, las túnicas y los mudras de manos. Muchos de ellos también atenuaron masivamente o eliminaron por completo las consideraciones filosóficas que animaban a las personas a tratar bien a los demás, considerar los resultados posteriores de sus acciones y hacer lo correcto”.

“Creo que es importante pensar más específicamente sobre lo que queremos decir cuando hablamos, usamos o cultivamos la atención plena”, continuó Hafenbrack. “Significa cosas muy diferentes para diferentes personas. Espero que esta investigación lleve a las personas a pensar en ella como una serie específica de prácticas con efectos psicológicos específicos que pueden diferir según las intenciones detrás de ellas y el contexto que las rodea, en lugar de una vaga panacea que siempre hará que las personas y quienes las rodean sean mejores. apagado en cada situación.”