Prohíben la publicidad de hamburguesas

Es sabido que varios alimentos generan un impacto en el clima, bueno, en verdad cualquier actividad humana lo hace, el punto es el rango. Y la tolerencia. Debido al impacto climático de los alimentos, una ciudad decidió desincentivar el consumo de carne, en general, y de hamburguesas, en particular. La ONU dice que el ganado genera más del 14% de todos los gases de efecto invernadero producidos por el hombre, incluido el metano.

A partir de 2024 y debido a la moción pedida por GroenLinks, un partido político verde de Holanda, la ciudad de Haarlem en los Países Bajos prohibirá la mayoría de los anuncios de carne en los espacios públicos.

“La carne es muy dañina para el medio ambiente. No podemos decirle a la gente que hay una crisis climática y alentarlos a comprar productos que son parte de ella”, dijo Ziggy Klazes, concejal de GroenLinks que redactó la moción, al diario Trouw.

Hay varias razones por las que la producción de carne produce gases de efecto invernadero y empeora el calentamiento global. Por un lado, los bosques a menudo se talan para dar paso al pastoreo de ganado y la producción de alimentos para animales, lo que reduce la capacidad de la Tierra para eliminar el dióxido de carbono de la atmósfera. Luego está el hecho de que los propios animales producen gases de efecto invernadero: las ovejas y las vacas, por ejemplo, producen grandes cantidades de metano a partir de sus procesos digestivos.

El gobierno de la ciudad de 160.000 habitantes dice que aún no se ha decidido si la carne producida de manera sostenible también se incluirá bajo la prohibición de anuncios. La movida no es nueva. Ámsterdam y La Haya ya han prohibido los anuncios de las industrias de la aviación y los combustibles fósiles.

Un portavoz del concejal afirma que es ‘la intención llevar a cabo la moción’. Pero aún no se ha encontrado ninguna forma en la que se pueda emitir la prohibición. “El departamento legal tiene hasta 2024 para encontrar algo al respecto”, dice. El portavoz añade que el municipio solo puede prohibir la publicidad en las marquesinas. “De lo contrario sería censura y no queremos eso”.

Otras políticas y normativa ecológica

La política de Haarlem es parte de una prohibición más amplia de anunciar cosas que aumentan el consumo de combustibles fósiles. También incluye cosas como vuelos y automóviles de vacaciones, así como, obviamente, anuncios de petróleo y gas. Tampoco es la única ciudad que lo ha hecho: Ámsterdam ha prohibido los anuncios de compañías de aviación y combustibles fósiles, mientras que Norwich, en el Reino Unido, también ha prohibido los anuncios de productos “dañinos para el medio ambiente”.

Como vegetariana, también quería dejar de hacer publicidad de carne de la industria industrial, como pollos para asar. Y eso fue lo primero. El ayuntamiento apoyó esta idea y el municipio fue enviado a pedir a los operarios de las marquesinas que dejaran de poner estos anuncios.

Como antes con la declaración de la crisis climática en la ciudad, la moción tiene un valor principalmente simbólico. “Declaramos la crisis climática en Haarlem y luego tienes que ser consistente, creo. Entonces tienes que comprometerte, de lo contrario no estás trabajando con integridad”. Simbólico, porque la pregunta es si tal prohibición es posible, reportó NH Nieuws.

Cuando el concejal Robbert Berkhout escribió al ayuntamiento la semana pasada que había informado a tres de los cinco operadores que dichos anuncios ‘ya no están permitidos’, la noticia se salió de control, se viralizó.”Hemos declarado la crisis climática en Haarlem y luego hay que ser coherente”, dijeron.

Derecho constitucional a la libre expresión y a la publicidad

Obvio, la norma se ha enfrentado a la oposición del sector cárnico y de algunos que dicen que sofoca la libertad de expresión, que viola el derecho constitucional al directamente prohibir, cercenar, este tipo de anuncios.

“Las autoridades están yendo demasiado lejos al decirle a la gente lo que es mejor para ellos”, dijo un vocero de la Organización Central del Sector Cárnico.
El partido de derecha BVNL lo calificó como una “violación inaceptable de la libertad empresarial” y dijo que “sería fatal para los criadores de cerdos”. Los acusan de ser la dictadura.

De hecho, Herman Bröring, profesor de derecho de la Universidad de Groningen, dijo que la prohibición podría infringir la libertad de expresión y dar lugar a demandas por parte de los mayoristas.
Aproximadamente el 95% de las personas en los Países Bajos comen carne, pero más de la mitad no la come todos los días, según Estadísticas de los Países Bajos, reporta la BBC.

Las reacciones verdes

En primer lugar, no se trata de prohibir la publicidad de toda la carne, aclaran quienes apoyan la medida. Solo califica la carne controvertida de la cría industrial, como los pollos de engorde. Además, si la prohibición realmente entra en vigor, sería solo la prohibición de estos anuncios en las decenas de marquesinas, donde el municipio alquila espacio. “Y no para empresarios de la ciudad como carnicerías o tiendas de papas fritas”, dice Klazes, una impulsora. El espacio público permanece libre para promocionar la carne.

Y luego el término ‘prohibición’. Klazes preferiría que se prohibieran los anuncios y cree que el municipio tiene opciones para esto porque no debería permitirse excluir empresas, pero los grupos de productos sí pueden. Tomemos, por ejemplo, la prohibición de la publicidad del tabaco. Pero querer algo no significa que sucederá, explica NH Nieuws.

Haarlem quiere sentar un precedente, pero desde un punto de vista legal todavía es cuestionable si alguna vez llegará a prohibir la publicidad de carne orgánica. “Cómo se deben dar las manos y los pies aquí depende de las autoridades”. La pregunta es si los operadores y anunciantes cumplirán con la solicitud. “Lo que me gusta es que hay un revuelo al respecto y que la discusión sobre estos comerciales está en marcha”, declaró.

Hamburguesa vegetal: